Cinco razones para operar con divisas

El volumen negociado diariamente en el mercado forex supera los 5 billones de dólares. A diferencia de las materias primas y otros activos, las divisas no se negocian en mercados organizados sino que son productos over-the-counter (OTC). Debido a su tamaño, muchos traders lo consideran el mercado más puro que existe.

Las divisas siempre se negocian en pares, lo que significa que los traders deciden comprar o vender el valor de una divisa con respecto a otra, por ejemplo, el euro con respecto al dólar (EUR/USD). Tomando como ejemplo este par de divisas, si usted creyese que el euro se apreciará frente al dólar, comprará o se pondrá largo en EUR/USD. Por el contrario, si cree que el euro se depreciará frente al dólar, venderá o se pondrá corto en EUR/USD. Cuando se opera con divisas, la primera divisa del par se denomina «divisa base» y la segunda se conoce como «divisa de cotización».

Este es otro de los beneficios que derivan de las enormes cantidades que se negocian diariamente en el mercado forex. Todos los mercados tienen una horquilla de oferta y demanda (bid/offer o bid/ask): la diferencia entre el precio de compra y el precio de venta. Cuando más amplia sea la horquilla, más a su favor tendrá que moverse el mercado para no perder dinero con la operación y que, incluso, le resulte rentable. En los principales pares de divisas, como el GBP/USD o el EUR/USD, esta horquilla suele ser de tan solo un punto (conocido como «un pip») o incluso menos. Esto convierte al mercado forex en, posiblemente, el más barato de todos los mercados financieros en lo referente a costes operativos.

Es muy difícil forzar un cambio de dirección en un par de divisas concreto. A diferencia de las acciones, los pares de divisas no se ven afectados por unos malos resultados anuales, por la revisión de las previsiones de beneficios o por las rebajas de dividendos, sino por los principales acontecimientos económicos, como las variaciones de los tipos de interés, los datos económicos de un país o la inestabilidad política. Por eso es importante que los traders de divisas estén al día de los acontecimientos geopolíticos y mundiales, ya que podrían tener repercusiones importantes en las tendencias y en los precios del mercado forex.

En teoría, todo esto hace que pueda resultar más fácil predecir la dirección del mercado en forex que en otros mercados que se ven golpeados por factores más insignificantes. El hecho de que el mercado de divisas sirva como barómetro de las principales economías lo hace atractivo tanto para los traders que aplican el análisis técnico como para aquellos que siguen un enfoque fundamental.

El mercado forex es un mercado auténticamente mundial que no está centralizado en una bolsa de valores como la London Stock Exchange o el mercado de futuros de Chicago. Funciona las 24 horas del día, cinco días a la semana. La negociación comienza el domingo por la noche (hora del Reino Unido) cuando abren los mercados asiáticos. La actividad pasa después al Viejo Continente, que le pasa el testigo a Nueva York cuando los traders europeos se van a casa. Cuando cae la noche en Nueva York, vuelven a abrir los mercados asiáticos y el ciclo se repite hasta el viernes por la noche, cuando cierra el mercado estadounidense.

La mayoría de los traders necesitan que el mercado se mueva al alza o a la baja para obtener un beneficio, por lo que desean al menos cierto grado de volatilidad. Esta es otra de las razones para operar con divisas, que el mercado nunca es aburrido. Incluso en los días más tranquilos, los principales pares de divisas suelen registrar fluctuaciones de entre 30 y 70 puntos. Muchos ven en estos movimientos una oportunidad para intentar beneficiarse del trading intradía. Cuando el mercado se mueve de verdad, no es raro que los movimientos superen los cien puntos. Es precisamente esta volatilidad la que atrae a muchos traders minoristas como usted al mercado forex.